La Calèche es un restaurante pequeñito y de montaña ubicado en una calle escondida en Llívia.
Pero de desconocido tiene poco, cuando alguien hace tan bien las cosas, corre la voz y consigues llenar cada noche.
Cuando entréis en La Calèche os teletransportaréis a un refugio de montaña: madera de pino y cuadros de esquí antiguos por doquier.
Pep, os acogerá como gran anfitrión que es y os explicará todos los platos con todo el detalle y mimo que vosotros deseéis.
Unos buenos amigos nos habían recomendado hasta en dos ocasiones probarlo, y oye, nos encantó! De lo mejor que hemos probado últimamente.
Una carta a base de producto de proximidad, productos con “nombre y apellido” que dan forma a una carta ceretano-mediterránea (¿esto existe? Al menos en La Calèche, sí).
¿Nuestros favoritos? Las Bravas (podéis pedir 1/2 ración), el Falso Risotto (Plato del día), el Huevo “mollet” con sobrasada, miel y patata y el Carpaccio de Vaca Vieja.
Os recomendamos que compartáis todos los platos pues la carta está ideada con este fin (4-5 para dos personas).
Nos faltó probar los postres, pero estábamos tan llenos que fue imposible. ¿La solución? Volver.
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Llívia – Travessera dels Forns, 7
Las Bravas, el Falso Risotto (Plato del día), el Huevo “mollet” con sobrasada, miel y patata y el Carpaccio de Vaca Vieja.
30-40€/pp
No.
Sin terraza y muy pocas mesas, reservad.
Os recomendamos llamar directamente y preguntar.
Sin web.
972 14 63 82
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