Hacía tiempo que le teníamos ganas, y decidimos escoger una ocasión especial para hincarle el diente a Gresca Bar.
Gresca Bar es la versión más desenfadada de Rafa Peña, un chef que está pisando muy fuerte.
Gresca Bar pretende ser el bar en el que tomar un buen vino y compartir platillos, pero… ¡qué platillos! Ese nombre no les hace justicia.
El espacio
Un espacio en pleno Eixample dividido en dos: el Gresca, más formal y ‘de mantel’, y el Gresca Bar, con 2 barras y unas pocas mesas alineadas en el pasillo que une la entrada con la cocina.
El alma del espacio es la cocina, en el que observaréis trabajar a un equipo de cocineros minuciosamente coordinados.
Os recomendamos que pidáis la barra de la cocina, sólo hay sitio para 6 comensales y vale mucho la pena.
La carta
En la carta encontraréis materia prima de primera, platos de toda la vida, (de cuchara y no tan cuchara), con acabados 2.0.
Y para ejemplo, un botón: una hamburguesa de quitar el hipo, una pizza con tomate y burrata, la carrillera de ternera al vino tinto o las albóndigas con sepia.
Gresca Bar fue ideado para ser un bar de vinos, y de ahí la gran oferta de bodega que encontraréis.
Cuándo ir
Para los más sibaritas, cualquier día es ideal. Para los no tan sibaritas, reservadlo para una ocasión especial.
Tip: compartid todos los platos y dejaros asesorar con el vino. Podéis hacer copas.
¿Nuestros favoritos?
No os podéis ir sin probar el Bikini de lomo ibérico y comté, la Hamburguesa, la Pizza con tomate y burrata y las Albóndigas con sepia.
Para cerrar una gran cena, 2 postres porque no pudimos decidirnos. Aunque la Torrija estaba buenísima, nos quedamos con el pastel de chocolate.
Si te gustó, también te gustarán: Suculent, nuestra “Casa de comidas” favorita
Eixample – Provença, 230 El Bikini de lomo ibérico y comté, la Hamburguesa, la Pizza con tomate y burrata y las Albóndigas con sepia. 30-40€/pp (sin vino). Sí. Sin terraza | Con barra. Lunes A domingo de 13.30 a 15.30h y de 20.30h a 22.30h (cenas en 2 turnos). N/A 93 451 61 93